Competir un triatlon en algun lugar del pais o fuera te produce sensaciones diferentes; miedo, ansiedad, angustia, y otras emociones pero largar una carrera en tu ciudad natal donde creciste, jugaste y fuiste madurando te genera vivencias que alimentan la carrera del deportista.
La gente que se junta a ver la competencia te conoce porque compraba en el almacen o en la panaderia de la esquina, te vio cuando iniciaste tu carrera deportiva, entonces estas rodeado de tu publico tus hinchas.
Ese día uno se siente tan contenido rodeado de seres que te quieren y que te pasan energias positivas que cuando vas a largar el triatlon estas con toda la adrenalina corriendo por tus venas, claro que cuando va transcurriendo la competencia los gritos y aliento del publico te hacen ir cada vez más lejos y mas fuerte.
No puedo olvidarme de mi familia, hermanas, sobrinos que pusieron ese condimento extra que necesita todo atleta y ser humano para lograr conquistas en su vida.
Todo eso paso por mí el dia del Half Ironman de Concordia fueron momentos inolvidables y quedaran marcados en mi trayectoria como algo enriquecedor.
Como excepcion al dicho esta vez fui profeta en mi tierra, con un triunfo dificil de conquistar dandole un sabor especial.